Caminando sola
Por las vías de un tren fantasma
Atravieso túneles, bosques y mares
Pasa a través de mi cuerpo incierto
El esqueleto mecánico sin conductor
Sin pasajeros
Sin un destino
Siempre viajando
Sin saber a dónde llegarán
Las líneas metálicas que sigo
La lluvia se ríe de mí
Y la luna me observa
Prejuiciosa
Desde el cielo
No me importa, seguiré
Un paso le sigue al otro
Y las nubes pasan sobre mi cabeza
Presurosas
El polvo y el sol
Son mi eterna compañía
No me detendré
Siempre adelante
Sin tropezar, sin titubear
Siguiendo hacia el horizonte insondable
Más allá del monte
Más allá del coyote
No hay comentarios:
Publicar un comentario